Cómo trabajar con la preocupación y la ansiedad
Una vez un joven me pidió consejo porque estaba preocupado, en general, y experimentaba ataques frecuentes de ansiedad.
Por supuesto, tengo que decir que no soy terapeuta, así que no tengo ese tipo de sugerencias con respecto a la ansiedad. Pero desde el punto de vista del Método de Rescate Emocional, y también desde el punto de vista de las enseñanzas del dharma sobre la atención plena, una cosa que es realmente importante para tratar los ataques de ansiedad es traer la mente de vuelta al presente. He oído decir a algunos amigos que sufrieron ataques de ansiedad que en terapia también les dijeron: «trae tu mente de vuelta al presente».
Me gustaría sugerir que no necesitas desacreditar tus preocupaciones. Tus preocupaciones pueden ser relevantes. Pero lo que realmente tienes que hacer es examinar tus preocupaciones. Mira con atención y averigua cómo crees que se van a manifestar. Luego, fíjate en si realmente esas cosas se van a manifestar de esa manera o no.
Es importante examinar primero nuestras preocupaciones, para asegurarnos de que no nos preocupamos por algo que no va a suceder en absoluto. En lugar de eso, quieres centrarte en lo que realmente puede ayudar a remediar un posible problema. Así que examinas eso.
Examina la situación y ¡tómate un descanso!
En segundo lugar, tienes que asegurarte de no examinarla en exceso. Ese es el punto clave. Normalmente, cuando estamos ansiosos, examinamos demasiado la situación. Le damos demasiadas vueltas y eso resulta muy doloroso y difícil, e incluso perjudicial. Así que intentemos no hacerlo. En lugar de eso, puedes echarle un vistazo y luego tomarte un descanso. Examínalo de nuevo y luego tómate un descanso. Examínalo brevemente y luego asegúrate de tomar un descanso.
Cada vez que haces una pausa, regresas al presente. Eso es muy importante. Y cuando regresas al presente, puedes centrarte en tu respiración, por ejemplo, como en las técnicas de meditación con la respiración. O centrarte en un objeto visual. Como la televisión. O en objetos visuales como árboles y montañas, que resultan muy útiles.
Cualquier cosa que pueda ayudarte a distraer tu mente de aquello que te preocupa resulta muy útil. Pero es importante saber de qué te estás distrayendo. ¿De qué objeto estás distrayendo tu mente, y luego hacia dónde estás moviendo tu enfoque? Estás distrayendo tu mente de ese objeto de preocupación y ansiedad y trayéndola al presente: cualquier objeto en el presente.
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Trabajar con la preocupación y la ansiedad: un ejercicio
La próxima vez que experimentes ansiedad o preocupaciones, puedes intentar lo siguiente.
- Piensa en lo que te preocupa. Aunque parezca relevante o real, examina tus pensamientos al respecto. ¿Qué temes que ocurra?
- Pregúntate: ¿Es realmente probable que ocurra así, o no?
- A continuación, descansa tu mente. Trae tu mente de regreso al momento presente: tu respiración, tu entorno o cualquier objeto visual. Concéntrate en él y deja de examinar tus pensamientos o preocupaciones. Descansa en ese objeto y deja que tu mente disfrute de un pequeño descanso.
- Después de hacer una breve pausa, fíjate: ¿Cómo es mi respiración ahora? Mi cuerpo, mi mente. Cuando regresas al momento presente, ¿qué cambia?
Este artículo se basa en las enseñanzas impartidas por Dzogchen Ponlop Rinpoché durante el evento en línea «Una conversación con el autor Dzogchen Ponlop» en julio de 2021, organizado por Emotional Rescue Courses.